Caminando por Florida, me llamó la atención lo linda que estaba la Galería Güemes -que este año cumple 100 años- y entramos a recorrerla. Allí descubrimos que en el piso 14 hay un mirador, al que cada 20 minutos se puede subir a disfrutar de "Buenos Aires desde las alturas".
Esta galería -que queda en Florida 165 y también tiene entrada por San Martín 170- además de sus 14 pisos y 87 metros de altura, es considerada uno de los primeros rascacielos de Buenos Aires.
Fue toda una innovación para la época en la que fue construida (principios del 1900) ya que en el subsuelo funcionaba un teatro, un cabaret y un restaurante. En la planta baja, el paseo de compras -del que hoy todos disfrutamos-, en los demás pisos hay oficinas y departamentos. Y en el piso 14, este mirador con otro restaurante.
Su fachada está protegida por un plan del gobierno de la ciudad que consta en mantener -y proteger- las fachadas de los edificios más antiguos que forman parte de nuestra historia.
Ayer estuve en la zona con más tiempo, así que me acerqué a averiguar del mirador y un mozo me dijo que subiera directamente al piso 14, que allí detrás de una puerta vidriada estaría una chica con toda la información.
Subimos con Juanma, sacamos la entrada y esperamos que sea la hora de subir por una escalerita tipo caracol, muy angosta pero segura, de 2 tramos y walá: teníamos a Buenos Aires a nuestros pies!
José, fue un amable chico que subió con nosotros y nos mostró todos los lugares inimaginables que estábamos viendo en 360°: parte de la reserva ecológica, la zona de Wilde, los puentes de la Boca, Quilmes, las torres de Lugano, la zona de "Elefante Blanco", muchísimas cúpulas -entre ellas la del Barolo y el Congreso-, la punta del Obelisco y si no fuera por la neblina que estaba tan baja, hubiésemos divisado las costas uruguayas de Colonia y Carmelo.
Antes de despedirnos de José -que nos contó miles de detalles de las construcciones- nos aconsejó volver en invierno, y venir alrededor de las 17hs, cuando el sol comienza a bajar, porque es otra manera de disfrutar semejante vista.
La chica que está en estas fotos de abajo es Silvina, quien te recibe antes que subas al mirador y nos atendió con muy buena onda, nos mostró pedazos de la fachada italiana que tiene la galería que están expuestos allí donde se adquiere la entrada -y verán que mi bebé la estuvo ayudando un poquito mientras atendía a la gente-.
Un plan más que recomendado para todos: turistas, amantes de Buenos Aires, fotógrafos aficionados, curiosos de nuestra historia, TODOS deberían disfrutar esto que yo viví, para sacudirnos y recordarnos en la maravillosa ciudad que vivimos -más allá de toda su furia-.
La entrada tiene un valor de $40
y se puede ir de Lunes a Viernes,
de 9 a 12 y de 15 a 17:40.
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