El último finde largo estuvimos por la Ciudad que me vio crecer. Allí donde nació mi hermano y mi hijo mayor Nicolás. Lugar donde mis papás eligieron para vivir hace 32 años y nunca más se fueron. En esas calles forcé amistades que aún hoy perduran... el barrio está más lindo, sólo que en las calles ya no veo caras conocidas, simplemente recuerdos (de los mejores) que se me vienen a la cabeza en cada esquina que piso o a cada calle que llego. Me acuerdo de todo (pero no de todos), incluso del viento, inolvidable viento que siempre me molestó. Eso sí que no cambió.
Acá, algunas de las cosas que pudimos hacer en poquitos días para que Juanma conozca esta Ciudad, que no deja de crecer!
Plaza de Las Américas
(el que no se vino con los rollers o el skate no creció acá)
Chacra II
(nuestro barrio de toda la vida)
Amistades que te deja la vida
(y ahora con hijos)
Freschezza
(ideal para que los nenes se diviertan)
Visitando FM COMPROMISO
El arbolito de cada año que se ilumina para todos!
(esta vez lo vimos con pesebre)
Plaza Almirante Brown
Montecarlo, uno de mis lugares favoritos, imposible sacarlo a Juanma de ahí (alguno lo encuentra?)
Paseo de Los Artesanos
Cómo irnos sin probar la Crema del Cielo que comía mamá de chica siempre!
Bajar a la playa un ratito, un clásico cada vez que hay sol!
Hasta el último día recibimos visitas (mis compas de la primaria)
En el Free Shop del aeropuerto, todos elegimos algo.
Pre-embarque, que nostalgia irse...
Volando sobre el Océano Atlántico, maravillosa imagen:
Llegando a casa: la Ciudad de la Furia!
(No te pierdas el próximo post de Ushuaia, un lugar de ensueño).
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